Curiosidades e historias del C.D. Ribaforada

Capítulo II-c: Breve compendio de curiosidades en las primeras décadas del club

Primera competición oficial y camisetas "caras": En los últimos años de la década de los 40, parece que la afición local al fútbol va en aumento y se decide inscribir al equipo en competición federativa. En septiembre de 1949, el C.D. Ribaforada disputa su primer partido oficial, en Segunda Regional: Se enfrenta el día 11 de septiembre al Iruña de Tudela, finalizando con empate a cero. Pero lo más novedoso de esta nueva época es la equipación que lucirá el equipo durante esa temporada. No por los colores, que son los característicos del club -camiseta roja, pantalón negro y medias negras y rojas-, sino por el precio: las camisetas lucen números blancos a la espalda, con un precio de 110 pts. cada una -las de los números 1 al 9-; las de los números 10 y 11 valían 125 pts. cada una, por llevar dos números. Son las mismas camisetas que no quiso comprar el C.A. Osasuna por resultar demasiado caras. El C.D. Ribaforada tuvo que comprarlas por no tener tiempo material para adquirir otras, no por afán derrochador, que no estaban los tiempos para despilfarros...

Se repite la historia: Día de San Bartolomé pasado por agua: De nuevo ocurre lo mismo que el día 24 de agosto de 1935. El club ya contaba, a diferencia de la ocasión anterior, con un campo cerrado con cañas, con lo que se cobraba entrada a los aficionados en lugar de "pasar la bandeja" o vender los números de la rifa. Pero volvió a suceder: el día 24 de agosto de 1950, se había organizado un partido amistoso con un equipo de Zaragoza y, al igual que aquel mismo día de quince años atrás, un fuerte aguacero, una gran tormenta, provocó la suspensión del encuentro. Y, como si de una maldición se tratara, tampoco había acudido público al campo. Pero, en esta ocasión, no fueron los jugadores los que tuvieron que costear los gastos de desplazamiento a los jugadores visitantes, sino que fue el Ayuntamiento quien indemnizó al equipo rival pagándole lo acordado. Esto conllevó que, finalizada la temporada 50/51, y como pago de esta deuda, el club llevó los uniformes del equipo y el material deportivo al Ayuntamiento, quedando en la Casa Consistorial en calidad de depósito, con lo que el C.D. Ribaforada no pudo participar en competición oficial en los años siguientes, siendo un duro revés para el club. Ni que decir tiene que el club estaba pasando por momentos muy delicados económicamente.

Y hasta aquí estos retazos, estas pinceladas, que forman parte de la otra historia de nuestro club, la que no sale en la prensa, ni en las clasificaciones ni en las estadísticas, pero que sin duda atraerá el interés de los buenos aficionados al C.D. Ribaforada. Eran tiempos complicados, pero la ilusión por llevar el nombre del C.D. Ribaforada con orgullo pudo más que todas estas dificultades que se presentaban en el camino. LLegaría por fín el ansiado Campo de Deportes "San Bartolomé", el actual, y a partir de entonces, el punto de despegue del club hacia nuevas metas. Pero esa es otra historia...