miércoles, 21 de septiembre de 2011

Curiosidades e historias del C.D. Ribaforada

Capítulo III-b: De "La era de Linos" al "San Bartolomé", los feudos del C.D. Ribaforada

Una vez terminada la guerra civil (1936-1939), se retoman las actividades deportivas por parte del C.D. Ribaforada. El nuevo campo de fútbol se situaría, una vez más, en la parte norte del pueblo, pero esta vez un poco más a la derecha de ocasiones anteriores, en las cercanías de la Imperial Cerámica -lo que conocemos como "La Fábrica Vieja"-. Lo que sería muy próximo al Canal Imperial, en lo hoy es la zona ocupada por barrios de "Casas Baratas", entre la calle San Juan y la calle San Gregorio -y que tienen nombre de valles navarros: Belagua, Salazar, Ulzama o Roncal-. ¿Vendrá de ahí la mala fama que teníamos por ahí de que cuando el árbitro no lo hacía bien se le "encorría" hasta cogerlo y tirarlo al Canal... o es una leyenda urbana ? Pero el club está en horas bajas, a punto de caer al pozo, sin otros ingresos que los que se obtenían al pasar la bandeja durante los partidos entre los aficionados, que no eran muchos. Eran tiempos difíciles aquellos de la posguerra… 

Poco a poco, el club resurge de nuevo y se construye un nuevo terreno de juego en las eras, siempre al Norte, con las dimensiones de 98 metros de largo por 57 metros de ancho. Si bien los partidos que se jugaban seguían siendo amistosos, el crecimiento de la afición en la gente del pueblo anima al club para disputar, por ver primera, competición federada. Así, nace el campo "San Bartolomé", preludio de lo que sería el estadio actual. Además de recaudar por medio de la bandeja, se obtienen ganancias mediante una rifa. El entusiasmo es tal que se piensa, por vez primera, en cerrar el campo de fútbol con cañas, para así cobrar entrada a los aficionados. Son los últimos años de la década de los 40. Finalmente, la temporada 1950/51 comienza con el campo de deportes cerrado con cañas, gracias a la donación de los cañares del Soto de Bergizar al club por parte de la Corporación Municipal, siendo alcalde D. Ildefonso Echave, y a la ayuda desinteresada de los vecinos del pueblo en la tarea, incluyendo a directivos, jugadores y aficionados del club. Este primer campo "San Bartolomé" estaba situado, como hemos dicho antes, al Norte del pueblo, en los alrededores del actual, algo más “abajo”, en lo que sería la manzana comprendida entre la calle “Parlamento Navarro” (la calle de la Vía), la “Avenida Diputación”, la calle “Teodoro Gascón” (donde está el Club de Jubilados) al Sur y la calle “Travesía el Canal“ al Norte. Pero con una diferencia sustancial: estaba orientado en dirección este-oeste en lugar de ir de norte a sur, como es en la actualidad. La finalidad era la de evitar el fuerte Cierzo en los días de partido, ese viento del norte tan característico de nuestra tierra. 

Pero este primer campo de nombre "San Bartolomé" estaba condenado a desaparecer también. Mediada la década de los 50, se comienzan a construir un grupo de doscientas viviendas protegidas, y en los terrenos destinados para ello, se encuentra situado el campo de fútbol, con lo que desaparece y se construye otro provisional, algo más al norte del anterior, en espera del definitivo Campo “San Bartolomé”, el actual… que comenzaría a tomar forma cuando, el día 14 de Enero de 1954, se firmó ante notario una escritura en la que se reflejaba la cesión del Ayuntamiento de Ribaforada a favor del Patronato Benéfico de Construcción "Francisco Franco" de un terreno para la construcción de un Campo de Deportes y de un Hogar Juvenil, siendo alcalde de Ribaforada todavía D. Ildefonso Echave. Los primeros pasos para el que ahora es Campo Municipal de fútbol "San Bartolomé" ya estaban dados...

Y ¡por fín!, el proyecto del nuevo campo empieza a hacerse realidad. Tras múltiples gestiones, en las que participaron tanto D. Aurelio Gómez Gómez -sí, "Gomezán", el autor del libro "Historia del C.D. Ribaforada"- en calidad de Delegado local de Juventud y, como tal, presidente del C.D. Ribaforada, así como el alcalde de Ribaforada D. Angel Sanz de Ayala Zúñiga en reuniones con altos cargos gubernativos, se acometió la construcción por el Patronato de la Construcción "Francisco Franco" del nuevo campo de fútbol. Al pueblo no le supuso económicamente coste alguno el llevar a cabo estas obras, tan sólo la cesión de los terrenos que ya se habían hecho en enero de 1954 mediante esa escritura firmada ante notario y que se ha mencionado antes. Fueron algo más de cinco años y medio, entre el 20 de Octubre de 1955 y el 31 de Mayo de 1961, cuando finalizaron dichas obras. Todo el complejo construido (un rectángulo de un total de 186 metros de largo por 110 metros de ancho) comprendía lo que son las instalaciones propias del campo de fútbol (140 metros por 90 metros, de las que el terreno de juego serían 110 metros por 52 metros y el resto destinada a vestuarios y zona de espectadores), además de otras instalaciones como el frontón, una pista polideportiva y el Hogar Juvenil. Tan sólo quedaba la inauguración del flamante estadio "San Bartolomé", que se produciría el día 24 de Agosto de ese año 1961... hace justo 50 años. Comenzaba así la andadura de "El teatro de los sueños ribaforadero", donde muchas alegrías y algunas decepciones se han sucedido a lo largo de este medio siglo. Pero esa es una historia que dejaré para otro día. Hasta aquí, este pequeño recorrido por todos los feudos del C.D. Ribaforada, desde "la era de Linos" hasta el actual Campo Municipal de Fútbol "San Bartolomé".
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